TODOS

De la ira al amor

¿Quién habla de nostalgias ni perdones
si sus labios pronuncian mezquindades?
Los rencores nos llenan de maldades,
pues la bondad no busca soluciones

cuando pagan su afecto con traiciones,
cuando todas las probabilidades
se vuelven pesarosas realidades,
cuando siente morir sus ilusiones.

A la ira le sigue un desencanto
tan solo suavizado por el llanto.

La mirada, rendida del dolor,
parpadea su amargo sentimiento,
y el deseo bañado en el lamento
libra al fin una lágrima de amor.

Artesana, 11-2-17



El amor en verso

El amor es un tema recurrente
para el estro vital de los poetas;
un diamante tallado en mil facetas
donde nada se ve como se siente. 

Decir que el hielo abrasa, que está frío
el fuego y que no notas una herida 
aunque el alma se tenga ya partida
es propio de un intenso desvarío.

Pero ¿quién no ha volcado alguna vez,
llevado de un impulso enamorado,
sobre el verso una intensa paradoja? 

¿Quién controla la absurda lucidez
de un sentimiento alegre y desgraciado
que, al tiempo que te llena, te despoja?

Artesana, 26-1-17



El rencor (Edmundo Dantés)

El odio ha ido cuajándose en rencor;
condenado por culpa de un engaño, 
se agranda en mis adentros cada año 
el hueco que ha dejado el desamor.

A veces ya no siento ni el dolor
del mal que pudo hacerme tanto daño;
el corazón se va volviendo huraño
sumido en este intenso resquemor.

La venganza se enciende con los ruegos, 
y me ruegas que apague mi venganza
mientras ardo en un fuego de inclemencia.

Mis ojos tanto tiempo vieron ciegos
que veía perdida la esperanza, 
mas en ti vuelvo a ver mi antigua esencia.

Artesana, 11-12-16


Lo que quise

Volverme quise rima de poema
para leer mi nombre con el tuyo,
escritos por la tinta que, indeleble,
uniera para siempre nuestros versos.

Quise ser una nota de canción 
compartiendo contigo  partitura;
hacer de cada acorde un dúo aunado
al compás de la misma sintonía.

Quise ver en mi falsa realidad
una  luz del reflejo de los míos
tras el iris intenso de tus ojos...

Ahora sé que no entiendes mis palabras
ni me escribes poemas o canciones,
y que vi solamente lo que quise.

Artesana, 5-4-13


Distancia

Hay distancias nostálgicas que buscan
por las ondas del tiempo y del espacio
consuelo en cada huella del ausente,
llenándonos el alma de ansiedad.

Hay distancias de dudas hechas muros
capaces de ocultar una presencia,
que vuelven lo cercano lejanía 
sin siquiera empezar su recorrido.

Hay distancias vacías de pasión,
distancias tras silencios insensibles,
distancias de kilómetros mentales...

Prefiero muchas veces que estés lejos,
porque quiero sentirme junto a ti, 
y me mata, tan cerca, tu distancia

Artesana, 10-7-16


Agua que no has de beber...

Se desprenden las aguas de las nieves
disueltas de tu antojo clandestino,
y me inunda su celo cristalino,
pero ya no me engañas ni conmueves.

Tus besos me provocan solo ganas
de probar otras bocas más livianas.
No he de calmar el ansia de esa sed
porque el amor flotando a tu merced
es luna de presentes sin mañanas, 
reflejos entre oscuras sombras vanas.

Deja correr el agua que no bebes
hacia el cauce marcado en su destino,
mi fuente no ha de estar por el camino
desgraciado de los amores breves.

Artesana, 21-6-16


Golondrina

Me alcé sobre las casas encaladas
dejando atrás la espuma blanca y pura;
sobrevolé tormentas de ternura
y el viento de las horas desgraciadas. 

Mis alas se sostienen agotadas
después de tan enorme singladura,
sorteando lo impuro, hacia la albura,
sin beber en las aguas estancadas.

No detuve mi vuelo acompasado,
por larga que la ruta se me hiciera,
hasta verme posada aquí a tu lado.

No pienso en el verano ni siquiera...,
quiero ser golondrina que ha llegado 
para hacer junto a ti la primavera.

Artesana, 11-6-16


El amor

El amor dentro tuyo se acelera
y, apuntando directo al corazón,
dispara proyectiles de pasión
cargados por la ardiente primavera.

Se acerca sigiloso a su trinchera
mientras tiembla encogida la razón
porque busca una nueva sensación
vestida de ardorosa guerrillera.

Le gusta conquistar la noche oscura
para ser el final de la aventura
donde aventura el alma su destino.

Y así va camuflado entre la gente
con aire repetido y diferente
hasta que se interpone en tu camino.

Artesana, 17-8-14

Mal de amores

Llevo conmigo tu imagen grabada,
gozo al mirarte, sintiéndome espejo
sin realidad, el humilde bosquejo
de tu existencia en mi ser reflejada.

Busco de alivio a mi pena buscada
más alejarme, mas menos me alejo, 
quiero quejarme y tampoco me quejo,
tanto quererte me lleva a la nada.

Eres el virus del ansia febril,
la esclavitud que al librarme me ahoga
cuando, embrujada, de modo sutil
a tu persona mi ser se subroga,
y, aunque padezca me vuelvo cerril,
porque me enferma y me sana tu droga.

Artesana, 1-8-14


Siente la belleza

Siente la belleza de la lozanía,
deja que rebose de amor cada poro,
libra por las frías rejas del decoro
la libido urgente de tu todavía.

Con los labios dulces de tierna osadía,
píntate las rosas del rubor que añoro;
la inocencia nace presagiando el lloro
porque su fragancia muere cuando el día.

Oye a la nostalgia cuajarse en mi acento,
pasaron las fechas, casi ni gastadas,
y como un suspiro se fue mi momento.

Mientras tú vacilas, las alas cerradas, 
nacen nuevas flores a las que abre el viento,
pero ya no es hora de las marchitadas.

Artesana, 28-7-14


Al céfiro becqueriano

Viento del sur ardiente y deseado,
de los desiertos guardas  resplandores,
por las marismas te untas de verdores
y venturoso llegas a mi lado.

Las ansias de este aliento enamorado
conduce a quien te lleven mis amores,
mas, si acaso te cuenta sus temores,
lleva lejos su anhelo desdichado.

No es por miedo, desidia ni arrogancia;
también te pedirá que la  consueles,
se impregnará tu brisa en su fragancia,

mezclarás sus suspiros con mis hieles,
y, aunque daño me cause la distancia,
más daño hará el recuerdo de sus mieles.

Artesana, 17-10-14


Tu nombre

Tu nombre lo pronuncio sin acento
vacío del valor de su sentido;
vacío de la fuerza del sonido
vibrante de su antiguo sentimiento.

Tu nombre deja un eco macilento;
el son de sus armónicos, perdido,
transita por las ondas del olvido,
vacías la razones de argumento.

Lo siento falto de sonoridad,
pues, como acaba el canto de las aves
al ver la primavera terminada,

muerta ya nuestra falsa realidad,
sus fonemas agudos se hacen graves
hasta alcanzar las notas de la nada.

Artesana, 5-5-12


Ninfas y nereidas

Doncellas del arroyo placentero,
¡Oh, ninfas de las aguas aplacadas!,
ayudadme en las horas desgraciadas,
escuchad mi suspiro lastimero.

Sus ojos donde muero y desespero
son nereidas con olas desbocadas,
me asomo a sus pupilas agitadas
y no siento que sientan lo que quiero.

Hacedle la mirada transparente,
que abandone las aguas procelosas
del enojo y me vea diferente.

Traedla a las riberas rumorosas,
tal vez en vuestro mundo complaciente
se hagan dulces sus lágrimas furiosas.

Artesana, 13-12-13


Tu recuerdo

Llevo tu imagen por dentro metida,
sueño contigo y recibo consuelo,
llevo tu imagen, despierta y dormida,
pero en el alba vendrá el desconsuelo.

Llevo tu imagen al alma cosida,
llevo tu imagen, la paz y el desvelo,
sol que de noche calienta mi vida
aunque de día se vuelva de hielo.

Soy incapaz de lograr mi rescate,
sin tus recuerdos me siento tan sola...,
mas, como aguanta del viento el embate
firme en la tierra la audaz amapola,
he de aferrarme al terreno seguro
para ganarme mi propio futuro.

Artesana, 12-10-13


Loca por ti

Siento llevar tu presencia grabada,
siento mirarte sintiéndome espejo,
siento sentirme el humilde reflejo
de una mujer de su luz apagada.

Siento vivir en tu carne encarnada,
siento buscarte pidiendo consejo,
siento que a veces de todo me quejo
y me conformo con poco, con nada.

Eres oasis, descanso fugaz
del manantial que me sacia y me ahoga,
Soy prisionera y te pido la paz,
mientras me amarro inconsciente a la soga.
Miento, padezco y me vuelvo incapaz
porque enloquezco en la sed de tu droga.

Artesana, 15-8-13

Adios

Amas a tu amante dándole suplicio 
y la quieres presa de tu mismo daño 
cuando dejas libre a ese ser huraño
que se finge amable siempre en el inicio.

De cara a la gente, no asoma un resquicio
de esta mala sangre, savia del engaño;
de puertas adentro, eres un extraño, 
pero me he librado de tu maleficio.

Me voy a un futuro donde estés ausente,
lejos del veneno de tu posesión.
Digan lo que digan, ¡qué sabrá la gente!,
no soy la culpable de mi situación,
llevas un estigma en el subconsciente,
la obsesión no cura nunca una obsesión.

Artesana, 14-7-13


Renegar

Renegar de los besos deseados
mordiéndose los labios de deseo,
desdecir los te quiero musitados
mientras finjo no verte si te veo.

Blanco y negro, certeza y titubeo,
dos polos por tus ojos limitados,
escapo de los límites marcados
y me siento de mis impulsos reo.

No escucho, no comprendo, no razono,
solo el peso de tus indecisiones
sin pasado, futuro ni presente.   

No escuches, no comprendas, no razones,
el miedo al desamor del abandono
puede hacer realidad lo inexistente.

Artesana, 3-6-13



Te llevo dentro

Siento llevarte tan dentro metida,
sueño contigo, mi infierno y mi cielo,
vivo apresado en la red de tu pelo,
tela de araña que envuelve mi vida.

Es la prisión por tu amor redimida,
solo mirarte me brinda consuelo,
de tus recuerdos se calma mi celo
cuando te siento lejana y perdida.

Eres al tiempo la paz y el tormento,
flor con espinas de suave corola,
vienes y vas en volutas de viento
como se acerca y se aleja la ola.

Siendo su luz me ensombreces el alma
porque le das y le robas la calma.

Artesana, 2-3-13

Del desamor

Rememoro apenado lo vivido,
los recuerdos evocan sensaciones,
me dominan las mismas emociones
a pesar de saberlas sin sentido.

Tus desprecios apagan mi latido,
desarmado de tantas objeciones,
de las tantas y tantas sinrazones
que buscó tu carácter resentido.

Si te veo regreso al punto exacto,
al momento donde he tocado fondo,
y me llevas de nuevo hasta el infierno.

El amor que te tengo sigue intacto,
se desliza por dentro hacia lo hondo, 
y me abrasa en mi propio fuego interno.

Artesana, 8-5-13

Quiero ser

Quiero ser sinalefa de un poema
para unir a mi nombre con tu nombre;
la rima consonante que indeleble
enlace para siempre nuestros versos.

Quiero ser la verdad de la razón
despejando sin miedos una duda;
la respuesta final del silogismo 
resuelta entre certezas de caricias.

Quiero ser la modorra de la tarde,
la luz que te ilumina si sonríes,
el iris encendido de unos ojos
que llenen de sentido las palabras
y respirar tu aliento acompasado
al compás del latido de mi pulso.

Artesana, 5-4-13


Tus ojos 

Tus ojos son los mares agitados,
en donde se ahogan todas las protestas, 
pues mueren sin remedio mis propuestas 
al borde de sus límites salados.

A veces un destello acariciante 
recorre por su cenit las pupilas,
entonces sus vorágines, tranquilas, 
me envuelven cariñosas un instante.

Me miren como miren son hermosos, 
perversos, inocentes o pasivos, 
mas, libres ya los diques defensivos, 
quisiera verme dentro de sus posos

y, náufrago ante el lago de su espejo,
salvarme con la luz de tu reflejo. 

Artesana, 22-2-13


El amor

El amor dentro tuyo se acelera
y, apuntando directo al corazón,
dispara proyectiles de pasión
cargados por la ardiente primavera.

Se acerca sigiloso a su trinchera
mientras tiembla encogida la razón
porque busca una nueva sensación
vestida de ardorosa guerrillera.

Le gusta conquistar la noche oscura
para ser el final de la aventura
donde aventura el alma su destino.

Y así va camuflado entre la gente
con aire repetido y diferente
hasta que se interpone en tu camino.

Artesana, 17-8-14

Mal de amores

Llevo conmigo tu imagen grabada,
gozo al mirarte, sintiéndome espejo
sin realidad, el humilde bosquejo
de tu existencia en mi ser reflejada.

Busco de alivio a mi pena buscada
más alejarme, mas menos me alejo, 
quiero quejarme y tampoco me quejo,
tanto quererte me lleva a la nada.

Eres el virus del ansia febril,
la esclavitud que al librarme me ahoga
cuando, embrujada, de modo sutil
a tu persona mi ser se subroga,
y, aunque padezca me vuelvo cerril,
porque me enferma y me sana tu droga.

Artesana, 1-8-14


Siente la belleza

Siente la belleza de la lozanía,
deja que rebose de amor cada poro,
libra por las frías rejas del decoro
la libido urgente de tu todavía.

Con los labios dulces de tierna osadía,
píntate las rosas del rubor que añoro;
la inocencia nace presagiando el lloro
porque su fragancia muere cuando el día.

Oye a la nostalgia cuajarse en mi acento,
pasaron las fechas, casi ni gastadas,
y como un suspiro se fue mi momento.

Mientras tú vacilas, las alas cerradas, 
nacen nuevas flores a las que abre el viento,
pero ya no es hora de las marchitadas.

Artesana, 28-7-14


Al céfiro becqueriano

Viento del sur ardiente y deseado,
de los desiertos guardas  resplandores,
por las marismas te untas de verdores
y venturoso llegas a mi lado.

Las ansias de este aliento enamorado
conduce a quien te lleven mis amores,
mas, si acaso te cuenta sus temores,
lleva lejos su anhelo desdichado.

No es por miedo, desidia ni arrogancia;
también te pedirá que la  consueles,
se impregnará tu brisa en su fragancia,

mezclarás sus suspiros con mis hieles,
y, aunque daño me cause la distancia,
más daño hará el recuerdo de sus mieles.

Artesana, 17-10-14


Tu nombre

Tu nombre lo pronuncio sin acento
vacío del valor de su sentido;
vacío de la fuerza del sonido
vibrante de su antiguo sentimiento.

Tu nombre deja un eco macilento;
el son de sus armónicos, perdido,
transita por las ondas del olvido,
vacías la razones de argumento.

Lo siento falto de sonoridad,
pues, como acaba el canto de las aves
al ver la primavera terminada,

muerta ya nuestra falsa realidad,
sus fonemas agudos se hacen graves
hasta alcanzar las notas de la nada.

Artesana, 5-5-12


Ninfas y nereidas

Doncellas del arroyo placentero,
¡Oh, ninfas de las aguas aplacadas!,
ayudadme en las horas desgraciadas,
escuchad mi suspiro lastimero.

Sus ojos donde muero y desespero
son nereidas con olas desbocadas,
me asomo a sus pupilas agitadas
y no siento que sientan lo que quiero.

Hacedle la mirada transparente,
que abandone las aguas procelosas
del enojo y me vea diferente.

Traedla a las riberas rumorosas,
tal vez en vuestro mundo complaciente
se hagan dulces sus lágrimas furiosas.

Artesana, 13-12-13


Tu recuerdo

Llevo tu imagen por dentro metida,
sueño contigo y recibo consuelo,
llevo tu imagen, despierta y dormida,
pero en el alba vendrá el desconsuelo.

Llevo tu imagen al alma cosida,
llevo tu imagen, la paz y el desvelo,
sol que de noche calienta mi vida
aunque de día se vuelva de hielo.

Soy incapaz de lograr mi rescate,
sin tus recuerdos me siento tan sola...,
mas, como aguanta del viento el embate
firme en la tierra la audaz amapola,
he de aferrarme al terreno seguro
para ganarme mi propio futuro.

Artesana, 12-10-13


Loca por ti

Siento llevar tu presencia grabada,
siento mirarte sintiéndome espejo,
siento sentirme el humilde reflejo
de una mujer de su luz apagada.

Siento vivir en tu carne encarnada,
siento buscarte pidiendo consejo,
siento que a veces de todo me quejo
y me conformo con poco, con nada.

Eres oasis, descanso fugaz
del manantial que me sacia y me ahoga,
Soy prisionera y te pido la paz,
mientras me amarro inconsciente a la soga.
Miento, padezco y me vuelvo incapaz
porque enloquezco en la sed de tu droga.

Artesana, 15-8-13

Adios

Amas a tu amante dándole suplicio 
y la quieres presa de tu mismo daño 
cuando dejas libre a ese ser huraño
que se finge amable siempre en el inicio.

De cara a la gente, no asoma un resquicio
de esta mala sangre, savia del engaño;
de puertas adentro, eres un extraño, 
pero me he librado de tu maleficio.

Me voy a un futuro donde estés ausente,
lejos del veneno de tu posesión.
Digan lo que digan, ¡qué sabrá la gente!,
no soy la culpable de mi situación,
llevas un estigma en el subconsciente,
la obsesión no cura nunca una obsesión.

Artesana, 14-7-13


Renegar

Renegar de los besos deseados
mordiéndose los labios de deseo,
desdecir los te quiero musitados
mientras finjo no verte si te veo.

Blanco y negro, certeza y titubeo,
dos polos por tus ojos limitados,
escapo de los límites marcados
y me siento de mis impulsos reo.

No escucho, no comprendo, no razono,
solo el peso de tus indecisiones
sin pasado, futuro ni presente.   

No escuches, no comprendas, no razones,
el miedo al desamor del abandono
puede hacer realidad lo inexistente.

Artesana, 3-6-13



Te llevo dentro

Siento llevarte tan dentro metida,
sueño contigo, mi infierno y mi cielo,
vivo apresado en la red de tu pelo,
tela de araña que envuelve mi vida.

Es la prisión por tu amor redimida,
solo mirarte me brinda consuelo,
de tus recuerdos se calma mi celo
cuando te siento lejana y perdida.

Eres al tiempo la paz y el tormento,
flor con espinas de suave corola,
vienes y vas en volutas de viento
como se acerca y se aleja la ola.

Siendo su luz me ensombreces el alma
porque le das y le robas la calma.

Artesana, 2-3-13

Del desamor

Rememoro apenado lo vivido,
los recuerdos evocan sensaciones,
me dominan las mismas emociones
a pesar de saberlas sin sentido.

Tus desprecios apagan mi latido,
desarmado de tantas objeciones,
de las tantas y tantas sinrazones
que buscó tu carácter resentido.

Si te veo regreso al punto exacto,
al momento donde he tocado fondo,
y me llevas de nuevo hasta el infierno.

El amor que te tengo sigue intacto,
se desliza por dentro hacia lo hondo, 
y me abrasa en mi propio fuego interno.

Artesana, 8-5-13

Quiero ser

Quiero ser sinalefa de un poema
para unir a mi nombre con tu nombre;
la rima consonante que indeleble
enlace para siempre nuestros versos.

Quiero ser la verdad de la razón
despejando sin miedos una duda;
la respuesta final del silogismo 
resuelta entre certezas de caricias.

Quiero ser la modorra de la tarde,
la luz que te ilumina si sonríes,
el iris encendido de unos ojos
que llenen de sentido las palabras
y respirar tu aliento acompasado
al compás del latido de mi pulso.

Artesana, 5-4-13


Tus ojos 

Tus ojos son los mares agitados,
en donde se ahogan todas las protestas, 
pues mueren sin remedio mis propuestas 
al borde de sus límites salados.

A veces un destello acariciante 
recorre por su cenit las pupilas,
entonces sus vorágines, tranquilas, 
me envuelven cariñosas un instante.

Me miren como miren son hermosos, 
perversos, inocentes o pasivos, 
mas, libres ya los diques defensivos, 
quisiera verme dentro de sus posos

y, náufrago ante el lago de su espejo,
salvarme con la luz de tu reflejo. 

Artesana, 22-2-13



Engaños 

Te llegaron sus ramos de flores
con aroma de infidelidad
o sus joyas en pago de errores,
triste aval sobre tu soledad.

Cuenta embustes de todos colores
procedentes de una falsedad
que prefieres tomar por verdad
para huir de certezas peores.

Si pretexta cualquier cita urgente
se refugia en sus muchos enredos,
de este modo no puedes negarte,

y, aunque siempre sabrás que te miente,
tras tus ojos asoman los miedos
que le dejan volver a engañarte.

Artesana, 2-1-13



Amor imposible 

Se acercaba al rosal la mariposa 
haciendo mil cabriolas en el aire, 
mientras un saltamontes, al desgaire, 
de un salto se asentaba en una rosa. 

La ninfa levemente también posa 
en la flor sus patitas con donaire, 
y el cigarrón sintiéndose en desaire 
la miró de manera belicosa. 

Rendido al reparar en su belleza, 
el odio se cambió por embeleso
disipando su enfado con presteza, 
mas, cuando quiso darle un simple beso, 
ella huyó viendo en él solo un rival 
a causa de su esencia desigual.

Artesana, 4-8-12 

Engaños 

Te llegaron ramos con caras flores;
para compensar infidelidades,
recibiste joyas pagando errores,
que le han puesto precio a tus soledades.

Si preguntas dice que son rumores,
malos entendidos y falsedades,
aceptadas siempre como verdades
por negar certezas que son peores.

Te pretexta citas de modo urgente,
porque aún disfraza sus mil enredos.
Lo creerás si dice que viaja a Marte.

Y, aunque cada noche sabrás que miente,
tras tus ojos nota los grises miedos
que le dan las alas para engañarte.

Artesana, 20-7-12


La sirena y el tritón

Las sirenas acuden al Parnaso
a ensayar sus hipnóticos cantares
tras los rayos de sol crepusculares
siguientes al momento del ocaso.

Una de ellas sentada llora al raso,
ha visto a las Nereidas con collares
y suplica a los dioses de los mares
remedio a la injusticia de su caso:

"No quiero perlas de álgidos fulgores,
quiero cálidas telas de colores,
pues me veo muy sosa en mi reflejo".

Y un tritón que por ella bebe amores
le hizo persiguiendo sus favores
un fular con la red de un aparejo.

Artesana, 19-7-12


El amor

Impulso que despacio se acelera,
tristeza desprovista de razones,
el hielo calentando sensaciones:
verano, otoño, invierno y primavera.

Un camino directo con atajos,
la llegada en el punto de partida,
sentir al ver el sol la anochecida:
euforias, decaimientos y altibajos.

Siempre será el amor contradicción,
es ida y vuelta, es calor y frío
mezclados en perfecta proporción.

La soledad en medio del gentío,
los versos de un poema, una canción
y el lleno cenital de tu vacío.

Artesana, 4-2-12

Tus ojos 

Dos escondidos mares sosegados
donde sin rumbo flotan mis protestas 
mientras se ahogan todas las propuestas 
a merced de sus límites salados.

Dos lunas de un destello acariciante 
que cruzan por su cenit la pupila; 
cuando alguna emoción las encandila 
me envuelven con su luz solo un instante.

No importa como miren son hermosos, 
inocentes, perversos, o pasivos, 
naufrago ante los guiños de su espejo.

Quiero alcanzar el fondo de sus posos
y, librados los diques defensivos, 
bañarme en el cristal de su reflejo. 

Artesana, 3-3-12 


En la mar de tu marea 

Tantas veces rehusé su roce alado, 
tantas veces su airosa voz restalla 
contenida detrás de mi muralla, 
rompeolas de un pulso sofocado. 

Esperaba, al socaire, refugiado 
donde el poniente pierde la batalla, 
donde melancolía, triste, encalla, 
donde duerme el amor descompasado. 

Hoy despierto mirando las balizas 
del azul de tus ojos, que verdea 
al vaivén de unas lágrimas huidizas. 

Y, sintiendo el salado olor a brea, 
otra vez tensaré las viejas drizas
cara al viento en la mar de tu marea. 

Artesana. 8-2-08


EL HUECO 

El tedio ha ido cuajándose en dolor 
ajado mi sentir por los engaños, 
y noto tras el paso de los años 
el hueco que ha dejado el desamor. 

Fríamente se instala allí el rencor, 
el corazón roído de los daños 
va haciendo sus latidos más huraños 
sumido en un profundo resquemor. 

Pero hoy lo revistes de añoranza 
con el eco amoroso de este ruego 
que viene a despertar sus emociones. 

Me recompone el pecho tu esperanza, 
levanto las paredes de mi ego 
y vuelvo a estar repleta de ilusiones. 

Artesana, 7-6-08


Llanto

Las palabras naufragan indolentes 
atrapadas de alguna voz reseca, 
la razón desbordada se te obceca 
con rencores que arrecian inclementes.

Su fragor va dejando el alma hueca, 
sin control las ideas insolentes 
tras los ojos se agolpan impacientes 
mientras la risa se hace triste mueca. 

Libre al fin una lágrima salada 
rueda dulce su amargo sentimiento, 
y la ira se ahoga sosegada

por la lluvia nacida del lamento 
escondido en la pena traicionada 
del secreto que nubla tu mirada.

Artesana, 1-8-08

Juntos

Traigo amargor de sal en las amuras
curtidas por lunáticas tensiones,
mareas de espumosos nubarrones
retaron sin cesar sus singladuras.

Quiero ahora la sed de tus venturas,
a salvo entre reveses y pasiones,
navegar en tu lago de aguas puras
aunando compartidas emociones.

Cuando mi pulso llegue a ti ya incierto
como el mar recalando en las arenas,
cuando el viento atempere en la virada 
y mi sangre navegue azules venas,
solo quiero el refugio de tu puerto,
mano a mano, mirada con mirada.

Artesana, 11-11-08



Quinto aniversario 

Sobre el blanco del lino natural,
dispuestas como novias primorosas,
aguardan la vajilla, cinco rosas,
las velas y las copas de cristal.

La plata, reflejando en su metal
las luces, pinta sombras caprichosas,
que bailan frente a la pared ociosas
dando un aire, a la atmósfera, irreal.

Él llega sin tardanzas ni retrasos,
envuelven su figura ya cercana
las encendidas llamas mortecinas.

Casi siento sus risas y sus pasos..., 
mi vecina se acerca a la ventana
y sin clemencia cierra las cortinas.

18-5-17


No quiero una estrella

¿Para qué quiero yo que me des una estrella
si me hieren sus rayos? Pasada la ilusión,
cuando ya la conquista se hace dominación,
¿de qué sirve el embrujo de la orquídea más bella?

Me miras como el juez que juzga una querella,
con la estricta mirada vacía de perdón;
Se acabaron las mieles, se acabó la pasión,
solo buscas la forma de marcarme tu huella.

Los días tan felices de dichas y de mieles
se fueron amargando por esta desconfianza
que clava en tus sentidos la angustia de sus dardos.

Ya no quiero perfumes ni esmeraldas ni pieles...
Es como una cadena el aro de mi alianza
y tu rosas fragantes son espinosos cardos.

Artesana, 16-5-17


Celos atávicos

Bebe Otelo en la fuente del amor
ambrosía cuajada de sospecha;
tras cada complacencia, el mal lo acecha
sediento de un atávico rencor.

Cuando, amante, lo embriaga el fiel candor
de la inocente esposa, se despecha,
y, bajo la ternura insatisfecha,
sus entrañas se inundan de dolor.

Desdémona es la fiebre que lo embarga,
a la vez dulce copa y copa amarga;
pues, agriadas por las conspiraciones, 

sus ardientes caricias se hacen hielos,
y las hieles amargas de los celos 
envenenan de insidia sus pasiones.

Artesana, 20-11-16


Amores perseguidos

Vuelan las palomas de los pensamientos
dejándose en tierra las obligaciones
que imponen las leyes o las  convicciones
cuando las elevan pasionales vientos.

¿Quién les pone puertas a los sentimientos?,
los instintos vencen a las bendiciones;
las almas disfrutan de las emociones
que atan a los seres como juramentos.

Heroicas  parejas de historias galantes
donde el compromiso llega al paroxismo
se ven acosados por algún rencor,

mas, aun tras la muerte, se aman los amantes...;
hechos de ternura, pasión y erotismo,
no hay lazos más fuertes que los del amor.

Artesana, 8-11-16

Adios

No quiero amor de beso con suplicio
ni ser la presa fácil para el  daño 
cuando liberas a ese ser huraño,
dulce y amable solo en el inicio.

Puertas afuera, no hay ningún resquicio
de mala sangre, vives del engaño;
puertas adentro, eres un extraño, 
y al fin me libro de este maleficio.

Huyo a un futuro donde estés ausente,
sin el veneno de tu posesión.
Hablan, murmuran, ¡qué sabrá la gente!,
no tengo culpa de mi situación...,
llevas grabado bajo el subconsciente
el mal que al alma mata de obsesión.

Artesana, 25-7-16


Sumisa y voluble

El, pretendiendo disfrutar sin brida,
solo buscaba compañera ardiente
con quien gozar de su ansiedad urgente,
mas, tras la entrega, del amor se olvida.

Ella, empezando a recorrer la vida,
busca pareja con su ardor naciente
para la sed que en los adentros siente,
pero a su amor se quedará prendida.

Lo ama y lo odia sin ningún juicio,
porque, aunque sepa que al final la engaña,
mira a través de su rendido anhelo.

Si hay de esperanzas el menor resquicio,
sobre las alas de cualquier patraña
sube sumisa del infierno al cielo.

Artesana, 13-8-13